Chris Magnus, crítico de políticas migratorias de Trump, asume riendas de CBP

El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, tomó hoy el juramento ceremonial al nuevo director de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), Chris Magnus, quien asumió el cargo en diciembre pasado.

“Este es un gran día para nuestro Departamento y nuestro país porque tenemos un líder probado y distinguido que toma las riendas de esta organización”, dijo Mayorkas.

Magnus recordó que ya tuvo una ceremonia de juramento en diciembre, necesaria para emprender de inmediato su tarea tras la confirmación en el Senado, pero “fue una ceremonia pequeña en mi oficina” en Tucson (Arizona).

“Estoy muy honrado de que el presidente (Joe Biden) me haya designado para dirigir Aduanas y Protección Fronteriza”, añadió.

En su nueva responsabilidad, Magnus deberá lidiar con la seguridad de las fronteras del país, un gran reto si se tienen en cuenta las críticas de los conservadores al presidente Biden por la abrumadora llegada de migrantes indocumentados, entre los que se cuentan miles de menores.

Magnus fue un crítico de las políticas de inmigración del ahora expresidente Donald Trump (2017-2021). Al postularlo en abril del año pasado la Casa Blanca destacó la “amplia experiencia del nominado en abordar problemas de inmigración”.

También recalcó el “papel clave (de Magnus) en la reconstrucción de la confianza de la comunidad en (las instituciones dedicadas a) la aplicación de la ley y en la reducción drástica de la cantidad de tiroteos y homicidios” al estar al frente del Departamento de Policía de Tucson (TPD).

Magnus no ha estado exento de controversias, ya que en junio pasado intentó dimitir -aunque su renuncia fue rechazada- después de la muerte en abril del hispano Carlos Ingram López cuando era inmovilizado por agentes en Tucson.

La votación de confirmación (por 50 a 47) de Magnus había estado estancada en el Senado durante semanas después de su audiencia el pasado 19 de octubre.

Magnus tendrá que enfrentarse también a la nueva implementación del programa “Quédate en México”, que obliga a los solicitantes de asilo a esperar en el país latinoamericano mientras sus casos se resuelven en EE.UU. Los agentes de CBP son los encargados de procesar a estos solicitantes.

La CBP, que cuenta con más de 60.000 empleados y es una de las organizaciones policiales más grandes del mundo, no tenía un jefe confirmado por el Senado desde abril de 2019.

Con información de EFE

SHARE