Los agentes del SEBIN ingresan al territorio norteamericano con visa de turista
Publicado el 05-26-2013
Investigan desvío defondos del cuerpo de inteligencia de Venezuela
POR JOSÉ PERNALETE
DIARIO LAS AMÉRICAS
MIAMI.-El presupuesto de la partida secreta del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) es utilizado por el director de este cuerpo de seguridad y también ministro de Interior y Justicia, Miguel Rodríguez Torres, para comprar dólares a precio preferencial a través de CADIVI, el ente administrador de divisas en Venezuela.
Según una fuente consultada, el alto funcionario, entre algunas de sus propiedades, es dueño de una tienda de artículos y prendas femeninas de alto costo ubicadas en dos centros comerciales de Caracas, uno de ellos localizado en instalaciones militares. El local es administrado por su esposa, quien viaja regularmente a China y Panamá para comprar la mercancía. La transacción, generalmente de 300.000 dólares, se cancela con bolívares fuertes depositados en efectivo en una cuenta del Banco de Venezuela.
La información lograda por DIARIO LAS AMÉRICAS también revela que Miguel Rodríguez Torres cuenta con testaferros, responsables de propiedades como apartamentos de residencia del ministro en la capital, en la ciudad costera de La Guaira y en Puerto La Cruz, en el oriente del país. Cuenta también con varios vehículos, algunos de ellos producto de acuerdos tras incautaciones del organismo tributario venezolano SENIAT.
Otra versión indica que el director del servicio de inteligencia compró con dinero en efectivo un auto todoterreno para su hermana en un concesionario ubicado en el este de Caracas. Se afirma que uno de los testaferros, quien opera junto a su hijo, fue juez del sistema judicial de la nación sudamericana. También ha transcendido que tienen oficinas en Estados Unidos y sirven de administradores para otro representante del oficialismo con un importante cargo en el poder legislativo.
El gobierno de Venezuela, desde que Hugo Chávez era presidente, enfrenta un gran problema habitacional que las autoridades prometieron resolver en repetidas oportunidades. Muchas casas han sido construidas en área de alto riesgo de deslave. Los constantes desastres naturales han socavado los suelos de muchos espacios de viviendas improvisadas. A esto se suma la falta de mantenimiento de los drenajes de las principales ciudades que colapsan con las lluvias. Ante esta situación, con la cercanía de elecciones, el poder ejecutivo ha emprendido proyectos habitacionales como la denominada Gran Misión Vivienda.
Un total de 128 viviendas fueron entregadas recientemente como parte de un proyecto habitacional en el estado Miranda, de la Ciudad Belén. Según fuentes extraoficiales, el ministro Rodríguez Torres estaría vinculado a la empresa encargada de la ejecución de este complejo urbanístico, integrado por 2.696 unidades residenciales.
También se ha filtrado sobre los severos daños provocados por una persona muy cercana al ministro en la oficina de la Dirección General del SEBIN tras una acalorada discusión. Durante el incidente, el local, equipos de computación y parte de mobiliario fueron destrozados por la mujer involucrada en la discusión. De estos daños hay registros y las leyes obligan a que sean reportados a la Contraloría General de Venezuela por ser bienes del Estado.
En relación con las operaciones de espionaje en Estados Unidos, la fuente confirmó que existe un seguimiento de varios representantes de la oposición venezolana y se han tomado fotografías de sus encuentros públicos y actividades privadas. La intervención de sus correos electrónicos se estaría realizando desde la nación sudamericana.
Los agentes del SEBIN ingresan al territorio norteamericano con visa de turista, a diferencia de oficiales de la DEA o del FBI que han viajado a Venezuela en varias oportunidades con la debida certificación y tras ser aprobados por los organismos de seguridad del gobierno de Caracas.
Por otra parte, según informes de la contrainteligencia venezolana, el militar en retiro Joaquín Suárez Montes ha fungido como espía en varias misiones diplomáticas. Suárez Montes fue “inhabilitado” en sus funciones como director del complejo residencial y comercial Centro Simón Bolívar por ser supuestamente objeto de una investigación sobre manejos ilícitos.
Suárez Montes fue designado funcionario ante la Organización de Naciones Unidas a pesar de la pesquisa en su contra, que le impide ocupar cargos públicos.
@jpernalete
