Relatora de la CIDH condiciona apoyo a nuevos tribunales.

La colombiana Catalina Botero le respondió a la fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, quien respaldó la propuesta del Gobierno de crear un nuevo organismo continental

Carolina Botero

EL UNIVERSAL
martes 17 de septiembre de 2013  01:48 PM

Panamá.- La propuesta venezolana de crear una nueva Corte regional de Derechos Humanos “está bien” si se orienta a proteger a las personas de forma imparcial y no a “legitimar lo que los gobiernos quieren”, afirmó hoy en Panamá la relatora especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Catalina Botero.

“Si Venezuela quiere crear una Corte, lo importante es que la Corte tenga las garantías para funcionar bien. No se trata de crear cortes para que legitimen lo que los gobiernos quieren, las cortes deben ser independientes y deben supervisar a los gobiernos”, declaró la experta colombiana y reseñó la agencia Efe.

Para la Relatora “está bien” que haya más organismos defensores de derechos fundamentales, siempre y cuando estos sean “fuertes, independientes y pueden entrar de manera imparcial, en serio, a mirar las violaciones a los derechos humanos de cada país”.

“Cuanto más controles haya, buenos controles, mejor para las personas”, añadió Botero, que participó este martes en una conferencia magistral sobre los estándares de libertad de expresión en el Sistema Interamericano de Protección de los derechos humanos, organizado por el Ministerio Público panameño.

La semana pasada la fiscal general de la República, Luisa Ortega, respaldó la propuesta formulada en reiteradas ocasiones por el fallecido presidente Hugo Chávez y la expresidenta del Tribunal Supremo de Justicia, magistrada Luisa Estella Morales, de un nuevo juzgado regional Derechos Humanos en el marco del Mercado Común del Sur (Mercosur), la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Alianza Bolivariana para los Pueblos (ALBA), el cual también tendría competencia para procesar a Estados Unidos aunque ese país no forme parte de él.

“Es hora de crear un mecanismo para enjuiciar y abrir un procedimiento a estas personas que en nombre de la Casa Blanca, del Pentágono y del Gobierno de Estados Unidos, invaden países, pero no sólo se quedan allí, sino que torturan”, señaló la fiscal general de Venezuela, país que la semana pasada abandonó la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH).