Comunicado de los cinco policias metropolitanos presos políticos: caso 11 de Abril
Cárcel Militar de Ramo Verde, 19 Sep 2012
Nosotros, MARCO JAVIER HURTADO, HECTOR JOSÉ ROBAIN,
ARUBE PÉREZ, LUIS MOLINA Y ERASMO BOLÍVAR, exfuncionarios
de la Policía Metropolitana, condenados injusta e ilegalmente por los
sucesos del 11-A desde hace ya 9 años y 6 meses, a través de
nuestros familiares y desde la prisión queremos hacer llegar a toda la
opinión pública el presente comunicado en ocasión a la carta notariada
y apostillada en Costa Rica que nos fuera enviada por el exmagistrado
y expresidente de la Sala de casación Penal del TRIBUNAL Supremo
de Justicia, Dr. ELADIO APONTE APONTE, en cuyo contenido
expresa como fue él, el encargado de girar las instrucciones a jueces y
fiscales a los fines de condenarnos a como diera lugar a 30 años.
Entre estos jueces menciona a la Dra. Maryorie Calderon, jueza que
ejecutó la orden sin probidad y menos aun sin compasión, violentando
el estado de derecho y de justicia social, el debido proceso y, peor
aún, dejando arrastrada su dignidad como jueza de la República.
Desde el inicio del proceso nos dimos cuenta de la manipulación
política y jurídica con la que se estaba llevando el caso, por lo cual en
incontables oportunidades nuestra defensa denunció ese cúmulo de
irregularidades en todas las instancias a que hubiera lugar; todo sin
respuesta favorable.
La defensa dio cuenta de:
– Manipulación de pruebas.
– Manipulación de testigos expertos de Cuerpo de Investigaciones
Científicas, Penales y Criminalísticas.
– Destitución de testigos expertos del CICPC que no se prestaban para
la manipulación.
– Destitución de uno de los defensores públicos por hacer su trabajo,
promovida por los fiscales.
– Asesoría por parte de los fiscales a testigos y funcionarios de la PM
para declarar en contra de nosotros y los comisarios con mentiras y
hechos ficticios.
– Manipulación de los jueces escabinos.
– Manipulación de las experticias balísticas, trayectorias intraorgánicas,
planos isométricos, cintas magnetofónicas, reconstrucción de los
hechos sin los imputados, entre otras.
Es decir, una componenda que duró 6 años para que en definitiva
fuésemos condenados a 30 años aun siendo inocentes. No existe ni
existirá excusa alguna para que este magistrado a estas altura esté
enviando cartas reconociendo lo indigno de su actuación, porque no
sólo nos afectó a nosotros sino que arrastró a nuestra familia y en
especial a nuestros hijos a vivir durante todos estos años momentos
injustos de sacrificio, ausencia, soledad y enfermedad.
Peor aun, parece que la orden presidencial de continuar presos
permanece. Hemos presentado ante las autoridades del Ministerio
para Servicios Penitenciarios los exámenes psicosociales en dos
oportunidades cuyos resultados han sido favorables. Así mismo en el
expediente está la clasificación de mínima seguridad realizada por la
junta de tratamiento del penal. En fin, hemos cumplido con todo lo que
establece el artículo 500 del Código Orgánico Procesal Penal a los
fines de que nos sean otorgadas fórmulas alternativas de
cumplimiento de penas que son un derecho consagrado en el artículo
272 de nuestra Carta Magna.
La jueza 1era de Ejecución de Estado Aragua, Dra. Adas Marina
Armas Diaz, en una sentencia absurda nos negó ese derecho. En su
decisión manifiesta que nos fue negada por ser contradictorio e
incongruente lo favorable del examen psicosocial y la clasificación de
mínima seguridad, cuando en el expediente rezan las actas desde el
año 2010 en las que fuimos clasificados de mínima seguridad por
haber mantenido una conducta ejemplar intramuros.
Todas esas artimañas jurídicas nos hacen pensar la vigencia de la
orden. Consideramos pues que todo esto es consecuencia de los
actos indignos que inicio Aponte Aponte en nuestra contra.
Exmagistrado, le queremos decir a usted, hombre indigno y
delincuente, que tarde o temprano la justicia le hará pagar todo el
daño que nos está causando, en especial el causado a nuestros hijos
quien por más de 9 años quedaron con sus madres y a la buena de
Dios. No se esconda bajo el techo de los extranjeros, véngase a
Venezuela y enfrente la justicia, así como lo hicimos nosotros que a
pesar de saber que en nuestra contra iba un proceso amañado nos
presentamos de manera voluntaria ante los tribunales nacionales y
dimos la cara
