María Teresa López, de 20 años, indígena Warao del estado de Delta Amacuro, usa una jeringa para alimentar a su bebé Fabiola, de un día, en una maternidad en Boa Vista, estado de Roraima, Brasil, el 21 de agosto de 2018. REUTERS / Nacho Doce

Agosto 22, 2018.- Mujeres embarazadas venezolanas están dejando el país debido a la falta de cuidados prenatales, medicamentos y pañales y están dando a luz del otro lado de la frontera en Brasil, donde tres bebés venezolanos nacen cada día.

“Si me hubiera quedado, mi bebé habría muerto. No había alimentos ni medicinas, ni doctores”, dijo María Teresa López mientras alimentaba a su hija Fabiola, quien nació el lunes por la noche por cesárea en la maternidad de Boa Vista, la capital del estado fronterizo de Roraima, en Brasil.

López, de 20 años, viajó a dedo 800 kilómetros desde su casa en el delta del río Orinoco hacia la frontera brasileña hace cinco meses. Es una de las cientos de miles de venezolanos que han huido de la agitación económica y política en su país, en su mayoría hacia la fronteriza Colombia.

La llegada masiva de venezolanos ha sobrecargado los servicios sociales en el estado de Roraima y llevado a un incremento del delito, la prostitución, las enfermedades e incidentes de xenofobia.

Los nacimientos de bebés venezolanos en la maternidad de Boa Vista subieron a 566 el año pasado y a 571 en la primera mitad de 2018, desde 288 en 2016 cuando comenzó el flujo de refugiados venezolanos, dijo el Departamento de Salud de Roraima. No hubo nacimientos en 2015, agregó.

La coordinadora de seguridad sanitaria de Roraima, Daniela Souza, dijo que el estado sólo tiene una maternidad y que está al límite, con pacientes durmiendo en catres en los pasillos. Jeringas, guantes y otros suministros se están acabando, agregó.

“Hay 800 personas que cruzan la frontera por día y muchas de las mujeres y niños necesitan atención médica”, dijo Souza. El número de venezolanos que asisten a los centros médicos del estado han subido de 700 en 2014 a 50.000 en 2017 y a 45.000 en los primeros tres meses de este año, agregó.

El Gobierno brasileño y el Ministerio de Información de Venezuela no respondieron inmediatamente a los pedidos de comentarios.

El gobernador de Roraima ha pedido a la Corte Suprema de Brasil que cierre la frontera para poder lidiar con la crisis migratoria, pero el gobierno federal en Brasilia lo descartó por razones humanitarias.

Carmen Jiménez, de 33 años, quien llegó desde Ciudad Bolívar con un embarazo de ocho meses y dio a luz en el hospital de Boa Vista, dijo que estaba sorprendida de ver a tantas madres venezolanas allí.

“No volveré a Venezuela hasta que haya comida y medicamentos y que las calles vuelvan a ser seguras”, dijo Jiménez sosteniendo a Amalia, su hija de cuatro días.

Teresa López, una india Warao del delta del Orinoco, afirmó que sólo regresaría para buscar a su hija mayor, quien se quedó con su abuela porque era demasiado joven para hacer el arduo viaje hasta la frontera.

Brasil la ha recibido bien y su marido encontró trabajo haciendo trabajos variados, pintando y cortando el césped, dijo López, mientras le daba leche a su bebé con una jeringa grande.

“No queda nada para nosotros allá”, sostuvo. “No me hice una ecografía hasta que llegué a Brasil y fue gratis. Quiero quedarme”, concluyó.

Por Nacho Doce/Reuters

Jackeline, 24, a Venezuelan from Bolivar state, holds her four-day-old baby Sofia at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Lismaris, 21, a Venezuelan from Monagas state, holds her three-day-old baby Cecilia at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Carmen Jimenez, 33, a Venezuelan from Bolivar state, holds her four-day-old baby Amalia at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Jasmilfer, 23, a Venezuelan from Monagas state, holds her five-day-old baby Arjunea at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Irene, 23, a Venezuelan woman from Santa Elena city, holds her six-day-old baby Ashlei at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Marisol, 44, a Venezuelan from Monagas state, holds her two-day-old baby Amalia at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Carla, 18, a Venezuelan pregnant woman, poses before she gave birth to her baby at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
A combo shows Venezuelan women posing at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. (Top L-R) Carla, a Venezuelan pregnant woman, Jasmilfer holds her five-day-old Arjunea and Irene, holds her six-day-old Ashlei baby. (Center L-R) Cecilia, holds her baby,Jackeline, holds her four-day-old Sofia and Carmen Jimenez, holds four-day-old Amalia baby. (Bottom L-R) Lismaris, holds her three-day-old Cecilia, Marisol, holds her two-day-old Amalia baby and Maria Teresa Lopez, uses a syringe feeding her one-day-old Fabiola baby. REUTERS/Nacho Doce
Maria Teresa Lopez, 20, a Warao Indian from Delta Amacuro state, uses a syringe to feed her one-day-old baby Fabiola, at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce
Cecilia, a Venezuelan woman holds her baby at a maternity hospital in Boa Vista, Roraima state, Brazil August 21, 2018. REUTERS/Nacho Doce

Embarazadas van a Brasil a dar a luz: Tres bebés venezolanos nacen cada día (FOTOS)