Julio 20, 2015.-El gobierno, con su arrogancia y agresividad se cree todopoderoso y por ende, cree que puede hacer lo que le venga en ganas. Sin embargo, lo único que refleja es una gran debilidad y una falta de apoyo por parte de la gente porque la agresión es símbolo de debilidad y de su propia frustración.
La afirmación la hace el analista político Carlos Blanco, en comunicación dirigida a El Carabobeño, con motivo de la situación por la cual pasa este diario, como consecuencia de que el gobierno no pone a disposición, a través de la corporación Alfredo Maneiro, las bobinas de papel que requiere este diario para imprimir las informaciones que debe suministrar como libro del pueblo
Blanco afirma que la libertad de expresión es el oxígeno que da vida a la democracia por lo cual medios, editores y periodistas viven uno de los momentos más aciagos de la historia contemporánea del país por la actitud de un gobierno que está desesperado por su intolerancia que le hace ver como enemigo a todo aquel que expresa una opinión diferente al régimen.
“Es tan grande su angustia y agresividad que acude a procesos penales contra periodistas y los medios de comunicación, por publicar información de carácter público. Aunado a lo anterior, se ha producido cierre de emisoras, televisoras, hasta llegar al manido expediente de no otorgar el papel necesario para el funcionamiento de los medios.
Considera el analista que, esta estrategia de carácter nacional se encuentra enmarcada dentro del Plan de la Patria que tiene como objetivo la “hegemonía comunicacional”, para lograr el control total de los medios de comunicación social acentuando la censura.
“De tal manera que, si bien es cierto, que la situación es complicada y difícil, para El Carabobeño y sus trabajadores, no podemos perder la fe y la esperanza confiadas en que el país saldrá de esto porque Dios tarda pero no olvida”.