Petra Rodríguez, propietaria de la casa. (Foto Fernando Aguirre)
Alfredo Fermín – Beatriz Oliva
30 noviembre 2014.’Familiares y amigos de los jóvenes Julver Pulido, Juan Carlos Esqueda y Sorangel Rodríguez, detenidos en el Comando Policial de la zona 6 de La Isabelica, mantienen la esperanza de que sean liberados, para pasar con ellos la Navidad y recibir el Año Nuevo.
Los tres detenidos están acusados de incendiar una camioneta de la empresa Alimentos Súper S. Pero, Petra Rodríguez, asegura que fueron aprehendidos acusados de haberle causado destrozos a su casa de La Isabelica, cuando fue la Policía de Carabobo la responsable de los daños al inmueble.
Después de esta detención Marina Benítez, madre de Julver Pulido, se dirigió a Fiscalía de Derechos Fundamentales a formular la denuncia sobre la captura irregular de su hijo. Aún no han recibido respuesta. El estudiante de Diseño Gráfico, en la Universidad Arturo Michelena, ha sido víctima del diferimiento de su audiencia en la Fiscalía Séptima, porque la titular del despacho Aracelys Pérez y su auxiliar Julisa Ramírez no se han presentado.
Benítez afirmó también que no existen evidencias de los cargos que le imputan a su hijo, detenido a las 6 am el 4 de agosto por funcionarios de la Policía Bolivariana de Carabobo. “Se lo llevaron del lugar donde se había refugiado durante una protesta en rechazo a las medidas económicas adoptadas por el Gobierno. Fue golpeado salvajemente causándole graves problemas emocionales”.
Marielis Rosales declaró en representación de Juan Carlos Esqueda, estudiante de 21 años que padece Leucemia. Desde el 4 de agosto cuando se produjo su detención, no ha recibido tratamiento médico. “Tiene 20 días vomitando sangre, lo cual fue notificado al Tribunal para que ordene su traslado a una clínica privada para realizarle exámenes”.
Petra Rodríguez propietaria de la casa de donde se llevaron a los tres jóvenes, reiteró que ellos no causaron destrozos en su vivienda. “Los muchachos venían siendo perseguidos por los policías que me acusaron de delincuente y cabecilla de la protesta. No soy cabecilla de nada, pero protesto y seguiré denunciando a la policía, y manifestando de acuerdo con artículos de la Constitución”.
Que se haga justicia
Justicia. Esto fue lo que pidió Surima Briceño, madre de Sorangel Alejandra Rodríguez Núñez, estudiante de la Universidad de Carabobo. No se trata de mendigar. Solo pide que las autoridades se tomen la molestia de revisar el expediente, donde el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) destaca que su hija no tiene nada que ver con el incendio, al igual que los otros dos jóvenes.
La audiencia de los muchachos ha sido diferida en tres oportunidades. La fiscal se retira y mandan a una persona a informar solo que se realizará otro día. “Le pido al Gobernador que tome conciencia de lo que ocurre. Son muchachos que toman su posición, y que tienen el derecho de protesta como lo establece la Constitución”.
Los familiares pueden ver a los jóvenes solo los domingos, en el comedor o en el patio, por un lapso de 15 minutos. “Ellos no quemaron la camioneta y las pruebas lo reflejan”.
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