Nacional y Política
lunes 01 de agosto, 2011
Fallo judicial atenta contra normas mínimas a favor de los reclusos

Por los tratos crueles que ha recibido María Lourdes Afiuni por parte del titular del Tribunal 26 de Juicio, Alí F. Paredes, solicitarán al Relator Contra la Tortura de la Organización de Naciones Unidas, Juan Méndez, una acción urgente a favor de la magistrada.

“Vamos hacer la solicitud basados en la Convención Contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes que considera como trato cruel la prohibición de exposición al sol y ejercicio que recientemente el juez Paredes ordenó”, dijo la directora del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello, (CDH-UCAB), Ligia Bolívar.

Explicó que la suspendida juez 31 de Control de Caracas ha sido sometida desde su detención, el 10 de diciembre de 2009, a unas condiciones de reclusión distintas a las normales. “En la cárcel donde estaba la jueza (INOF) todas las presas tenían acceso al sol y ejercicio, ella no. En el mejor de los casos le permitieron hacer caminatas pero nocturnas. Con la medida de arresto domiciliario, a la juez tampoco se le permite salir al jardín de su residencia y eso ha traído como consecuencia un deterioro de salud”.

Además, “el Poder Judicial no ha garantizado la atención médica oportuna, tomando en cuenta que la doctora Afiuni presenta dos quistes en su seno derecho desde hace 9 meses y que requiere con urgencia de una serie de exámenes para determinar si son cancerosos. Lo último que ha sucedido es que el juez Paredes le ha negado a la magistrada, a su familia y a la defensa el acceso a los resultados de varias pruebas que se le realizaron en el Hospital Oncológico Padre Machado”.

Bolívar consideró que Afiuni es un caso “emblemático”, no sólo por el hecho de ser la única juez en el mundo que está privada de su libertad por haber acatado una resolución de un órgano de protección de derechos humanos de la Organización de Naciones Unidas, “sino porque ha sido víctima de un Gobierno que se ha profesado, fuera de las fronteras, como humanista y socialista cuando en la realidad estamos frente a unos funcionarios e instituciones violadores de los derechos humanos de sus ciudadanos”.

“En este momento Venezuela aspira a una silla en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y la pregunta que la comunidad internacional tiene que hacerse es si el Estado venezolano tiene los méritos para sentarse en igualdad de condiciones con otros países, cuando tiene un record en violación a los derechos humanos”, expresó la también socióloga de la UCAB.

En junio la defensa de la jueza notificó al juez Paredes que Afiuni Mora, utilizaría las áreas comunes del edificio donde reside para ejercitarse y tomar el sol, basados en las reglas mínimas de la ONU para el tratamiento de los reclusos. La respuesta del tribunal, fue una orden de no permitir la salida de la magistrada al jardín.

Hoy está previsto que la jueza Afiuni Mora cumpla con la su presentación ante el tribunal para mantener su arresto domiciliario.

En Twitter: @aliciadelarosa