El régimen de Nicolás Maduro ordenó la clausura del restaurante Asados Taguanes, ubicado en el estado Cojedes, luego de que Edmundo González, el candidato opositor, y su familia almorzaron allí. La medida ha generado controversia y denuncias de persecución política por parte de la disidencia del país.
González, a través de sus redes sociales, expresó su indignación y apoyo a los trabajadores del establecimiento: “Cerraron el restaurante Asados Taguanes en Cojedes, donde mi familia y yo comimos de regreso a Caracas. ¿Por qué castigar a los trabajadores por recibir a quien piensa diferente? Los abrazo y les agradezco su cordial atención con una sonrisa y mucha esperanza”.
El candidato opositor señaló que este cierre es parte de una serie de acciones que evidencian “el irrespeto del poder a los venezolanos”. Denunció que este tipo de actos buscan intimidar y reprimir a aquellos que no están alineados con el régimen de Maduro.
“Este suceso se suma a otros que demuestran el irrespeto del poder a los venezolanos”, continuó González en su comunicado. Además, instó a la población a mantener la esperanza y la calma ante la situación que atraviesa el país. “Tengan la seguridad que vendrá el respeto y la paz. Faltan 20 días”, concluyó refiriéndose al período previo a las elecciones presidenciales del 28 de julio en las que el candidato de la Plataforma Unitaria es favorito para derrocar al chavismo.
Sin embargo, la alegría duró poco. Momentos más tarde, cuando Machado ya se había retirado del local, ubicado en Corozo Pando, Vía San Fernando, llegaron oficiales del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (SENIAT) a clausurar el sitio por no tener los papeles en regla.
“Aquí nos están cerrando el negocio porque vino María Corina Machado a visitarnos, pasó y nos compró 14 desayunos, gracias a Dios, aquí nos llegó el Seniat”, dice una de las mujeres mientras tres personas del organismo revisan documentación. “Primera vez en la vida que nos cae el Seniat. El único restaurante que están cerrando es este, este nada más. Hay tres restaurantes, hay panaderías, hay licorerías, bodegas, que no tienen los papeles tampoco y aquí nos están cerrando el restaurante”, agrega al reclamar que se trata de una mera represalia por recibir a la opositora.
La modalidad de arremeter contra los opositores que reciben a Machado durante sus recorridas por el país, que facilitan sus viajes o que se relacionan con ella de alguna forma son la nueva modalidad que el oficialismo encontró para tratar de limitar su influencia sin arremeter directamente contra la candidatura de su competidor, Edmundo González Urrutia.
Ya el pasado 4 de mayo, la dictadura había clausurado dos hoteles en los que la política se había hospedado con su comitiva. Uno de ellos fue el hotel Urumaco, en Coro, capital del estado de Falcón, que se enfrentó a sanciones económicas y la suspensión temporal de sus operaciones. El segundo fue El Paso, en Maracaibo, también tras la visita.
Pocos días más tarde, el 16 del mismo mes, el régimen replicó estas acciones en el hotel El Recreo, en la ciudad de La Victoria, aunque esta vez fue previo al paso de Machado y Urrutia por Aragua. “Les van a faltar papeles de esos para clausurar las casas de todos los victorianos que vamos a recibir al próximo presidente de la república. Vamos a ganar”, respondió el activista Carlos Daniel Zapata en un mensaje de redes sociales, demostrando que no se dejarán intimidar.
Los intentos del régimen de Maduro por sabotear a la oposición de cara a las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio no son una novedad. En mayo, los agentes del chavismo pusieron en marcha su maquinaria represiva y castigaron a unas mujeres por haber recibido a la líder opositora, María Corina Machado, en su local.
De camino al estado Apure, donde la dirigente fue recibida por una gran multitud en las calles, Machado frenó en un pequeño restaurante rutero para comprar el desayuno. Allí, se encontró con dos empleadas seguidoras, que no dudaron en demostrarle su emoción por la visita sorpresa y documentaron el momento con un video.
En las imágenes se escucha a Machado recordando haber comido rico en el pasado en ese comercio, mientras que las mujeres la abrazan y le dan fuerza para seguir. Inclusive, la política pasó a la cocina y se sacó fotos con ellas.
Con información de Infobae