Unos 600 migrantes que estaban en el campamento a la orilla del río Bravo cruzaron a Estados Unidos entre la tarde y noche de este jueves, luego de que un juez bloqueara el Título 42, una norma por la que Estados Unidos ha estado expulsando a migrantes indocumentados utilizando como pretexto la pandemia.
Los venezolanos dejaron 113 tiendas de campaña vacías, mismas que empezaron a ser retiradas el viernes por empleados de Servicios Públicos Municipales de México.
William Ochoa, un venezolano de 50 años, señaló que no deberían quitar las tiendas de campaña, porque si el Título 42 permanece vigente, los van a regresar rápido y no tendrán un lugar dónde guarecerse una vez que los deporten de forma exprés.
Con la decisión judicial, que tiene efecto inmediato, se anula la orden emitida por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) que ha permitido la expulsión de cientos de miles de migrantes por motivos sanitarios.
Esta regulación tiene su origen en una ley del siglo XIX diseñada para detener «la introducción» de enfermedades contagiosas en EE.UU.
Con el pretexto de esa normativa, EE.UU. no permite a los migrantes solicitar asilo cuando llegan a su territorio y son expulsados del país por la vía rápida.
Con información de AlNavío