El régimen de Maduro no podrá disponer de los 25 millones de euros depositados en tres entidades financieras en España, luego de que el Registro Mercantil de ese país le prohibiera recupar esos recursos del Estado venezolano.
De acuerdo con el diario El Mundo, estos fondos pertenecen a la filial de la Corporación Venezolana de Guayana.
El régimen solicitó cambiar la composición de la junta directiva de la CVG, que desde el 3 de enero de 2020 está en manos del presidente interino, Juan Guaidó, quien designó a Enrique Castells como directivo.
Castells acusó a la exdirectiva de la gestión de Maduro, María Rosario Falcón, y a quien el chavismo pretendía poner de presidente de la entidad, Jonathan Adolfo Ardila, de falsedad en documento mercantil e imposición de acuerdos abusivos.
El directivo designado por Guaidó advirtió que el objetivo de Maduro es traspasar el dinero de la CVG a Rusia como ya hizo con activos de PDVSA.
A pesar de que formalmente los hombres de Guaidó tienen desde esa fecha el control sobre el dinero en bancos españoles, los fondos permanecen bloqueados por la disputa de poder en Venezuela.
Con información de El Nacional
