Febrero 26, 2016.-Cuatro ONGs se sienten amenazadas por el presunto espionaje contra oposición venezolana. El gobierno de España comienza tomar cartas en el asunto. Los operativos de inteligencia bolivarianos se extenderían mas allá de España
Cuatro organizaciones con sede en el continente europeo se han sumado a la denuncia de los estudiantes venezolanos en España ante la fiscalía de ese país por el presunto espionaje al que fueron sometidos de parte del gobierno chavista.
“Estamos fotografiados en actos públicos donde este personaje participaba y acudía para obtener información”, dijo a el Nuevo Herald el abogado William Cárdenas, quien además preside sobre la Plataforma Democrática de Venezolanos en Madrid (PDVM), uno de los grupos adheridos a la denuncia.
Cárdenas se refiere al teniente coronel del ejército venezolano José Rafael Vásquez Mora, el hombre que fue identificado por miembros de la oposición — y por un ex teniente venezolano en un testimonio firmado — como cabecilla de una operación de inteligencia en suelo ibérico.
“Es una práctica ilegal que se ha ido extendiendo a través de las embajadas de Venezuela a diferentes países mediante las cuales el oficialismo pretende perseguir a opositores”, agregó Cárdenas.
El documento de adhesión fue enviado a la fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, el 19 de febrero e incluye a los grupos civiles PDVM , Asociación Civil de Venezolanos en Madrid (ACVM), VENEUROPA, ubicada en Bruselas, Bélgica, y Unión Venezuela Society Org, con domicilio en St. Albans, Reino Unido.
Al igual que la denuncia original de Estudiantes Venezolanos en España (EVE) presentada ante la fiscalía a finales de enero, las plataformas con base en Madrid PDVM y ACVM dicen haber sido víctimas de las tácticas de espionaje del chavismo de primera mano, ya sea por haber posado en fotografías con supuestos agentes en cubierto o por haber visto a personas “sospechosas” observándolos y tomando nota durante actos públicos.
Mientras que VENEUROPA y Unión Venezuela Society Org hacen hincapié en lo que consideran acusaciones infundadas y difamatorias a través de la televisión e internet hechas por Diosdado Cabello, ex presidente de la Asamblea Nacional, en su programa semanal “Con el Mazo Dando”.
“Nosotros también estamos siendo explotados, estamos siendo seguidos, no evidentemente como ellos [en España] que tienen un personaje [identificado], pero si este hombre [Cabello] habla de nosotros es porque tiene a alguien reportando información sobre nosotros”, dijo Patricia Betancourt, dirigente de VENEUROPA, en declaraciones a el Nuevo Herald.
Cabello había hecho acusaciones similares contra dirigentes de EVE en su programa el año pasado.
LOS ‘INFILTRADOS’
Henrry Narveiz Sosa, presidente de EVE España, dijo que desde principios del año pasado empezaron a ver a individuos que parecían monitorear sus actividades, pero que no habían podido identificar a ninguno hasta que surgió este caso.
“Comenzamos a tener acercamientos de supuestos espías, gente con apariencia de militar que se juntaba a fotografiarnos y que aparecía en actividades de la asociación civil”, contó. “ Algunos aparecían con el cabello pintado, encorbatados, iban cambiando su aspecto”.
El documento original de la denuncia de EVE, entregado a la fiscalía española el 22 de enero, menciona la manera en que Vásquez, un militar adscrito a la Embajada de Venezuela en Madrid, se presentó durante meses como estudiante universitario para infiltrarse en actividades de la oposición venezolana.
Entre finales de septiembre y principios de diciembre del 2015 el presunto espía participó de al menos cuatro eventos bajo un nombre falso, hasta ser señalado por efectivos de seguridad de una actividad durante la velada de las elecciones parlamentarias, que lo reconocieron como un “infiltrado” de la embajada.
Fue el 19 de septiembre, en una concentración frente a la Embajada de Venezuela en rechazo a la condena impuesta al líder opositor Leopoldo López, que Vásquez se retrató con Cárdenas, Sosa, Juan Gutiérrez, abogado de López, y activistas de Voluntad Popular.
Durante otro evento se fotografió también con Diana López, hermana del líder opositor preso.
Parte de la evidencia de la denuncia incluye el testimonio de Edmelcar Delgado, un ex teniente venezolano que vive actualmente con su familia en Tarragona bajo asilo político por cuestiones de persecución.
Delgado dijo haberse graduado en 1997 junto a Vásquez en la promoción Cnel. Luis María Rivas Dávila de la Academia Militar de Venezuela.
“Vásquez…cuya especialidad es la de policía militar, cuenta actualmente con 5 oficiales militares a su cargo (con grados de capitanes y tenientes), además de 8 funcionarios civiles pertenecientes al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, con quienes desempeña las labores de espionaje e intercepción de personas consideradas contrarrevolucionarias”, indica un fragmento del escrito.
LAS REPERCUSIONES
La fiscalía española respondió a la denuncia el 29 de enero, indicando que la documentación fue remitida a la Secretaría Técnica de la Fiscalía General del Estado para que “obren oportunamente en el ejercicio de sus funciones y me comuniquen la decisión que adopten” explicó Sosa, leyendo parte del comunicado por vía telefónica.
También se remitió una copia a la Fiscal de Sala Coordinadora de Cooperación Penal Internacional, Rosa Ana Morán Martínez.
Mientras tanto, el periódico español El País reportó el miércoles que el Ministerio de Asuntos Exteriores de ese país ha dado un aviso a la Embajada de Venezuela en Madrid para que “cesen las actividades de hostigamiento a la oposición venezolana en España por parte del teniente coronel José Rafael Vásquez Mora”.
“El departamento que dirige José Manuel García-Margallo ha preferido de momento lanzar esta advertencia en lugar de expulsar al presunto espía, lo que podría provocar una escalada de imprevisibles consecuencias con el régimen de Nicolás Maduro”, lee parte del artículo, que no hace mención de las fuentes de donde proviene esta información.
Los activistas esperan poder canalizar la denuncia a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Suiza y a la Subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo.
“Te sientes nervioso, te sientes observado”, dijo Carla Posada, líder de Unión Venezuela Society, desde Inglaterra. “Pero sobre todo sientes miedo de pensar en tu familia en Venezuela porque obviamente piensas y sientes que si estando aquí en Europa ellos [el chavismo] tienen los medios para vigilarte, imaginate qué no estarán haciendo allá con tu familia”.
