Los expedientes secretos

Los expedientes secretos

Una muerte, una tortura, una agresión. Tres víctimas sin justicia. Una misma ciudad. Los expedientes de los casos de Rosa Orozco ­madre de Geraldine Moreno­, Juan Carrasco y Marvinia Jiménez fueron trasladados inexplicablemente de Valencia a Caracas, con lo cual se violaron sus derechos de tener acceso a esos documentos desde el comienzo del proceso, como garantizan la Constitución y el Código Orgánico Procesal Penal. En todos los casos están involucrados miembros de la Guardia Nacional Bolivariana. En primera persona, las víctimas aseguran que no se cansarán de pedir justicia

4 DE MAYO 2014 – 12:01 AM

Rosa Orozco, madre de Geraldine Moreno

“Por Geraldine no hay una persona detenida”

El expediente de Geraldine tiene ya dos meses sin que lo entreguen. Se introdujeron dos requerimientos en la fiscalía principal de Valencia, uno el 21 de marzo y el otro el 28 de marzo. Le exigimos a Nidia González, fiscal superior de Carabobo que lleva el caso, que los entregara y ella argumentó que estaban en la oficina de Derechos Fundamentales en Caracas y por eso no se podían entregar copias. Dijo que si ella pedía una el proceso se detenía.

Le pregunte: Œ¿Hasta cuándo vamos a estar con esto? ¿Quién mandó eso a Caracas, si eso ocurrió en Carabobo?¹. Y me respondió que fue la fiscal general, Luisa Ortega Díaz. Le dije entonces que se lo tendría que pedir a Luisa Ortega y ella dijo que no era necesario. Sigo insistiendo. En el gobierno creen que nosotros no hemos agarrado un libro en la vida. Dicen que la mitad del expediente está en Carabobo y la otra en Caracas y eso es imposible; o te lo llevas o no te lo llevas. Por eso vine a Caracas  a hablar con Alfredo Romero, director del Foro Penal Venezolano. Le di un poder para que actúe en mi nombre porque no podemos seguir esperando.

Sabemos que es un guardia nacional quien mató a Geraldine. Era un pelotón de 10 motos. El que le dispara a Geraldine iba en la parte de atrás de una de las motos y le dijo al que iba adelante: ³Dispárale, quémale la cara². El guardia de adelante baja el fusil y no lo hace. Entonces el de atrás dice que él sí lo iba a hacer y le da dos impactos del fusil en la cara.

Han declarado como 15 o 16 testigos. Incluidos una señora y un reportero que vieron el pelotón. El reportero escucha cuando el guardia dice que va a disparar y se identifica y dice que es reportero. Hay una señora que le dice al que le dispara a Geraldine: ³Deja a la niña, deja a la niña². Y el guardia le responde: ³Métase porque también le vuelo la cabeza².

A Geraldine la recogimos nosotros, ella se quería parar de la camilla y nunca entendimos cómo hizo porque tenía 3% de la masa cerebral nada más. No tenía nada en el cerebro ya. Ella pierde el ojo izquierdo y el ojo derecho también. Lo único que me dijo fue: ³Mamá, me duele la garganta², ³Mamá, bendición². Hasta ahí estuvo mi hija. Por Geraldine no hay todavía una persona detenida.

No sé de qué estamos hablando, de quiénes estamos hablando. Todavía sigo pensando cómo el general Antonio Benavides ha dicho que es imposible que un guardia nacional le dispare a un venezolano. Le digo que yo quisiera hablar con él y decírselo. ¿Quiénes eran los que cargaban los uniformes y el armamento de la GNB? Que me explique, porque entonces ni sabemos quiénes son los que nos están cuidando. Que explique qué hacían esas personas con ese armamento.

El que dio la orden fue el gobernador Francisco Ameliach, cuando mandó a dar el ataque fulminante. Eso no tenemos ni duda, él lo escribió en Twitter el

17 de febrero y el 18 cayó Génesis Carmona y el 19 Geraldine. Por eso yo lo llamo asesino.

Como el caso de Geraldine, está el de Marvinia Jiménez, en el que ya está determinado quién es la guardia nacional que la agredió y dónde está. Pasa lo mismo con Juan Carrasco, que asegura haber sido violado y en la fiscalía dijeron que eso era mentira, que había sucedido antes. Continúa la impunidad por parte del gobierno; yo no puedo seguir esperando que el régimen nos pretenda decir lo que es real y lo que no.

Le reclamé a la fiscal superior que un señor le da una bofetada a otro por grosero y le dan ocho años de cárcel; y estos, que son asesinatos, todavía estamos esperando. Le dije: ³Dios quiera que a ti no te maten un hijo, porque no te quiero ver en el puesto en el que están todos los venezolanos a los que les ha pasado². Se puso a llorar.

Aquí nadie tiene que salir a dialogar. A Nicolás Maduro hay que exigirle, no pedirle; debe sentarse con las madres, con los jóvenes, con la Iglesia, el Foro Penal, Leopoldo López, María Corina Machado y Antonio Ledezma, que son los únicos que han dado la cara en este asunto. Aquí no tiene que estar la MUD.

Saco mi fuerza de los mismos jóvenes. Si no estuvieran conmigo yo no estuviera aquí hablando. Les pido a todas las madres de Venezuela que estén con los muchachos, como yo estaba con la mía. Acompáñenlos, ayúdenlos. Si no quieren marchar, por lo menos sírvanles algo. Nadie me puede decir que no le puedo llevar comida a un muchacho. Si nos unimos todos, aquí no pasa nada.

Si estamos dispersos, seguirá pasando algo. La riqueza de Venezuela son esos muchachos.

Yo estoy quedándome en un campamento cerca de mi casa, en el parque Geraldine Moreno. No tengo miedo. Me quitaron lo único por lo que podía tener miedo.

Juan Carrasco  Detenido y torturado por la GNB

“A mis abogados  les complicaron el trabajo”

El expediente de mi caso tampoco lo querían entregar, lo mandaron a Caracas sin explicación alguna. Uno iba a la Fiscalía a cada rato y decían que no podían entregarlo, que todo iba bien. Solo me dieron los documentos que tienen que ver con mi defensa y no con lo que me acusan. A mis abogados eso les complicó el trabajo.

Todavía  es incómodo salir a la calle porque la gente me reconoce: ŒAhí va el chamo al que violaron¹, dicen cuando me ven. Por eso quiero salir un tiempo de Venezuela, pero no quiero irme para siempre. No temo a lo que pueda pasar con mi caso porque sé que no quemé gandolas, porque eso pasó el

12 de febrero y yo no manifesté ese día, solo fui a la marcha y regresé a mi casa. Fue el 13 que me agarraron a mí. Dios proveerá, todo fluye. Sé que mi caso está por cerrarse, seguro me dirán que no puedo volver a manifestar .

Yo ahorita tengo que presentarme cada 30 días y tengo prohibido salir del país, pero por eso no voy a dejar de ayudar a la gente que quiere un cambio.

Yo me acerco a donde están los chamos a llevarles agua, comida, medicinas o tarjetas de teléfonos. Pero no me puedo quedar. Si hay problemas por las protestas, no salgo; pero al menos cuando está tranquilo voy a ayudar a todo el que me ayudó cuando estuve preso y estuve mal. Quizá no ayudo en la calle, pero ayudo para que se mantengan motivados. Para ellos significa mucho cuando me ven.

Yo no me puedo callar el hecho de que fui violado porque es una forma de evitar que eso se repita. Créeme que no he sido el único que fue violado.

Hubo un chamo en Táchira al que quemaron con un destornillador caliente, que se lo introdujeron entre las nalgas. Como le pasó a él, le ha pasado a muchos. Se han callado porque los amenazan y tienen miedo. Si me callo, no puedo defender a Venezuela. Eso no me hace menos hombre.

Los que detuvieron conmigo ya abandonaron el país con un asilo político. Yo veo mucho egoísmo de su parte. ¿Cuál es la lealtad de ellos? Ninguna. A Marvinia Jiménez la admiro, es una chama que da la cara por su hijo, su familia y por Venezuela. Yo no puedo bajar la guardia mientras haya estudiantes detenidos, mientras Leopoldo López esté preso. Yo tengo nacionalidad española, me pueden sacar de Venezuela por repatriación; pero si yo me voy para España de ese modo, de qué me sirve si no puedo regresar a Venezuela.

En Valencia la calle no se ha enfriado, solo que la gente, ante tantas detenciones, torturas y muertes se cuida, no se exponen para no arriesgar su vida. Yo a los que protestan les digo: fe y mucha fuerza, no se rindan; el que se rinde pierde. Lucha, lucha y lucha hasta alcanzar la estrella nunca alcanzada. Si no, jamás vas a superar los obstáculos que debes superar. La salida es la calle. A la gente no le alcanza el dinero, va a llegar un momento en que el bolsillo no les va a dar para nada y se va a dar cuenta.

Marvinia Jiménez,  golpeada por funcionaria de la GNB

“La Fiscalía 28 no me permite ver el expediente”

Mi situación está igual que al principio: la Fiscalía 28, que es la que lleva mi caso, no me permite ver el expediente. Dicen que hay muchos avances, que todo va bien, pero no muestran ninguna de las actuaciones que han hecho. Dicen que lo mandaron a Caracas para una reunión y no me informaron de qué es la reunión. Solo dicen que no me preocupe, que las investigaciones están adelantadas. Solo en la Defensoría me dieron copia del expediente de ellos, que únicamente tiene solicitudes a la Fiscalía 28 para que me pasen copias del expediente del caso. Puras solicitudes.

La abogado que me asiste, Jennie Gutiérrez, del Foro Penal, me dice que cuando no dan derecho a ver el expediente, en cualquier momento pueden llamar a la audiencia. Como en la audiencia de presentación no me dieron derecho a ver a un abogado, hay temor de que pase de nuevo en la audiencia preliminar. No solo pido que enjuicien a la mujer que me agredió, sino también a los hombres que detonaron armas cortas.

A la mujer no la ponen a derecho. Tiene una orden de captura por el Tribunal Sexto de Control. En la Fiscalía 28 me aseguran que la tienen a buen resguardo, me dijeron que no me preocupe, que ella no va a huir del país.

Que cuando proceda, la presentan. Yo tenía la protección de la policía municipal. Hace más de dos semanas no han vuelto a mi casa. Estuvieron frente a la casa hasta el día en que salí del reposo y empecé a caminar.

Ahora los llamó y no atienden el teléfono . Los colectivos me persiguen y han ido hasta al colegio de mi hijo. Empecé a solicitar que me reincorporen la protección. Amnistía Internacional me manda oficios vía correo para la Fiscalía principal, para el tribunal de protección de aquí, solicitando mi protección, y ellos no le paran a nada. Hasta el día que me dejen pegada los colectivos.

No puedo salir con mi niño. He salido a pie y se me pegan tres motos.

Siempre he visto a un mismo hombre con ellos. El día que me llevan detenida un civil me pidió las fotos que había tomado. Ese civil estuvo en el comando el día de la audiencia con una franela amarilla, la misma ropa que el día de la detención. En la audiencia hice alusión a él. Lo denuncié ante la Fiscalía 28 y ellos tomaron nota de todo. Ese mismo civil me siguió el día que me dieron de alta. Un día tenía una reunión con el Foro Penal y no pude ir porque los colectivos me persiguieron. Se han parado frente a mi casa a decir consignas a favor de Maduro. El tribunal sexto acordó la protección de la policía de Valencia, que no tiene límites, pero luego decidieron no volver. Me dijeron que iban a canalizarlo y no ha pasado nada. Por eso Amnistía Internacional les ha enviado los oficios.

Yo no creo en diálogo. Yo creo en depuración de las instituciones, la renuncia de los altos mandos, de la fiscal. Si no, aquí nunca habrá justicia. La forma de lograrlo es con la presión en la calle, pacífica. El diálogo no, solo legitima al gobierno. No estoy de acuerdo con la negociación de la Mesa de la Unidad. Tienen que tomar en cuenta nuestras exigencias.

Saber es un derecho

La legislación venezolana garantiza el derecho de las víctimas de estar informadas sobre sus casos desde el principio del proceso

El director del Foro Penal Venezolano, Alfredo Romero, señaló que no entregar el expediente de sus casos a las víctimas que los solicitan, como ocurre con Marvinia Jiménez y Geraldine Moreno, y como ocurrió con el de Juan Carrasco, viola la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que garantiza el acceso a la justicia.

El artículo 26 de la carta magna establece: ³Toda persona tiene derecho de acceso a los órganos de administración de justicia para hacer valer sus derechos e intereses (Š) El Estado garantizará una justicia gratuita, accesible, imparcial, idónea, transparente, autónoma, independiente, responsable, equitativa y expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o reposiciones inútiles².

Romero rechaza que a sus defendidas, Jiménez y la madre de Moreno, Rosa Orozco, no les den argumento alguno que justifique negarles los expedientes de sus casos, pues simplemente les dicen que los enviaron a Caracas. El expediente de Carrasco, que también fue enviado a la capital, se lo entregaron al Foro Penal porque Romero lo pidió directamente en la Fiscalía.

³No me explico por qué razón han hecho esto, no logro entenderlo², expresa el abogado.

³Si no se permite el acceso al interesado, la víctima o, en el caso de Moreno, a su madre, pues no se sabe qué se está investigando. Cuando se trata de un crimen la Fiscalía investiga, actúa en representación del orden público, pero también de la propia víctima. Entonces la propia Fiscalía niega a su defendido enterarse del caso, sabiendo que es el primer interesado², manifestó.

El Código Orgánico Procesal Penal también garantiza a la víctima su derecho a conocer el desarrollo del proceso judicial desde el principio, para hacer valer las tres posibilidades estipuladas en la ley: interponer una querella particular, adherirse a la acusación fiscal o refutar las actuaciones del Ministerio Público.

El expediente íntegro tiene que estar en manos del juez de la causa, que debe entregarlo a las víctimas si lo solicitan. Si no es así, implica la violación de la reserva de las actuaciones para terceros en la fase preliminar de la investigación.

El artículo 23 del COPP ordena: ³Las víctimas de hechos punibles tienen el derecho de acceder a los órganos de administración de justicia penal de forma gratuita, expedita, sin dilaciones indebidas o formalismos inútiles, sin menoscabo de los derechos de los imputados o acusados. La protección de la víctima y la reparación del daño a la que tengan derecho serán también objetivos del proceso penal.

³Los funcionarios que no procesen las denuncias de las víctimas de forma oportuna y diligente, y que de cualquier forma afecte su derecho de acceso a la justicia, serán sancionado conforme al ordenamiento jurídico².

Es un derecho de la víctima, de acuerdo con el artículo 122 del COPP, ³ser informada de los avances en el proceso².

http://www.el-nacional.com/siete_dias/expedientes-secretos_0_401960023.html