06-30-2013
POR JOSÉ PERNALETE
DIARIO LAS AMÉRICAS
MIAMI.- Franklin Mejías es un adolescente que llegó a Estados Unidos en 2011 a vacacionar junto a su familia. Durante el tiempo que debió ser tiempo de disfrute, contrajo una severa infección bacteriana causada por estreptococos. El tratamiento no impidió el deterioro avanzado de las extremidades superiores e inferiores de Franklin, lo que obligó a la amputación de las mismas.
Desde entonces, el muchacho, su padre y hermana se encuentran en suelo norteamericano. Luego de una mal asesoría legal, no actualizaron su estadía y se encontraban indocumentados, con el riesgo de ser deportados a Venezuela, su país natal.
Patricia Andrade, directora de Venezuela Awareness Foundation, dijo que al constatar el peligro de interrumpir la recuperación de Franklin y no completar su rehabilitación, el organismo canalizó la asistencia del congresista Mario Díaz-Balart, para lograr una solución ante la oficina del Servicio de Inmigración de los Estados Unidos.
“Luego de meses de revisión y preparación de documentos, [la Oficina de] Inmigración nos dio la buena noticia de que ofrecerían una ventana para realizar la legalización de estas personas” dijo Andrade, quien ratificó la disposición insistente del congresista y su equipo de trabajo en esta intermediación.
Recuerda la zozobra que padeció la familia ante la inconsistencia legal: “Eso era algo imposible para nosotros, sólo pensábamos que lo único seguro que teníamos era la deportación y Franklin podría recaer con una infección”.
Finalmente, el servicio de Inmigración otorgó el estatus de “Acción Diferida por razones humanitarias”. Esto le permite a la familia, además de la permanencia legal e indefinida en Norteamérica, facilitar trámites legales y las posibilidades de contar con calidad de vida.
El padre de Franklin puede trabajar de manera legal y también, obtener licencia de manejo, todo para contribuir con la asistencia de su hijo. Por sus condiciones, el adolescente debe contar con constante observación de su padre. Su hermana, Franny, está terminando de cursar estudios en high school.
VOLVER A CAMINAR
Luego de 3 años de mucho esfuerzo, Franklin Mejías, camina gracias unas prótesis diseñadas a su cuerpo. Las piezas tienen estampadas la bandera estadounidense pues agradece a esta nación la oportunidad de poder salvar su vida y convertirse en un joven como cualquier otro.
En un comunicado de prensa de Venezuela Awareness Foundation, la ong agradece “infinitamente el apoyo incondicional del representante Mario Díaz-Balart una vez le presentamos el caso de Franklin Mejías y su familia, quienes para ese entonces se encontraban fuera de status legal por lo que solicitamos su ayuda para que pudieran permanecer en el país sin temor a ser deportados. La receptividad del representante republicano hizo posible que hoy ya la familia goce de un status (Deferred Action) que les permitirá permanecer legalmente en el país”.
A juicio de Patricia Andrade, esta acción “es un milagro por lo imposible que era para ellos sin ayuda alguna. Ahora, Franklin está nadando hasta dos horas al día y hace otras actividades que en realidad nos sorprende. Sin duda, seres humanos como él, con su espíritu, nos obligan a pensar que las limitaciones sólo están en la mente”.
