Diciembre 14, 2016.-Hace nueve meses David habló con tedigoque.com sobre su vida en Venezuela y sus sueños por labrarse un camino en libertad. No lo tenía fácil este joven de 20 años, deportista, buen estudiante. Llegar a Miami sin nada, solo con sueños en una maleta, dejando atrás lo que podía haber sido una vida de éxitos si no fuera porque no lo dejaban expresarse, resultaba complicado. Pero él tiene a su favor el entusiasmo, el trabajo y el esfuerzo. Esta es su historia.

David Guillermo Bavaresco hace un tiempo llegó a Miami. Las protestas estudiantiles del año 2014 habían hecho que estuviera “fichado” en ls cuerpos policiales y con los círculos bolivarianos que vivían cercanos a su casa. El, sobre todas las cosas era un estudiante que quería formarse en su profesión de ingeniero y en su amado deporte, el Kárate. Tedigoque lo entrevistó hace unos meses. Su historia era conmovedora. Era la vida de alguien que amaba a su país y que veía un horizonte de opresión y persecución. Ya el deporte no era igual, tenía que asumir las órdenes de la gobernación de Carabobo y aceptar ver a su alrededor a esos personajes apoyados por el gobierno, sin aspiraciones de triunfar si no de poder. Así que con la chaqueta de Venezuela salió de Maiquetía luchar, a buscar otros rumbos.

David llegó a Miami sin saber inglés y con su historia de lucha y persecución. También llegó con el Kárate, con la ilusión de seguir aunque fuera practicándolo, no olvidándolo. Luego vinieron sus padres y él tenía que ayudar. Se puso a limpiar en una iglesia, en sus tiempos libres ayudaba a la Fundación Raíces propulsada por Patricia Andrade de Venezuela Awarness.

Un buen día la iglesia le dijo que ya no lo necesitaba y la vida se le hizo pedacitos por unos días. Pero Dios aprieta pero no ahoga, así que de pronto en aquel lugar que escogió Patricia para ayudar a muchos venezolanos que llegan sin nada a buscar un futuro diferente, David se encontró con un nuevo ángel que le ayudó en su camino.

Una de las colaboradoras de Raíces le comentó que tenía una amiga que estaba buscaba a alguien para trabajar. El ni preguntó de qué se trataba. Le pidió los datos y ya. Cogió su autobús y se fue para aquella dirección. Su sorpresa fue enorme cuando de pronto se encontró con un aeropuerto para hidroaviones. Necesitaban a alguien que fuera una especia de “todero” para ayudar en el negocio. Tenía que poner gasolina en los aviones, decirles a los pilotos dónde estacionar, cobrar…cualquier cosa que se necesitara. Pero allí iba a estar con un mejor sueldo que en la iglesia y con un nuevo sueño que podía volar y seguir el rumbo que se había fijado. Estudiar y continuar con su deporte.

Precisamente su deporte le dio una nueva oportunidad en la vida. Algunos de sus amigos, de aquellos que siguieron haciendo su deporte, como él, lo contactaron. Había un campeonato mundial de Artes Marciales en Orlando (Iska World Martial Art Champion 2016) y ellos podían participar. Así que se entusiasmo y lo hizo, se puso la chaqueta con la que había salido de Venezuela y junto a sus compañeros participó con esa bandera.

Compitió en la clase A cinturón negro…Y ganó. Ganó el campeonato mundial. Para él fue uno de los mejores días de su vida, “por no decir que es el mejor, porque se que vendrán otros mejores”.

Para no olvidar sus raíces y su lucha, David hizo un cartelito diciendo “No más dictadura” y posó feliz con su trofeo, su bandera y su denuncia.

Su historia de esfuerzo publicada en Tedigoque y su nuevo trofeo, llevaron a Patricia Andrade a ayudarlo para que siguiera su camino de éxitos. Le comentó a la senadora Ileana Ross Lethiner el caso de David y ella le escribió al presidente del Miami Dade College, (MDC) Eduardo Padrón. Era una cadena de ayuda hacia el éxito.

Un buen día estando en su casa, recibió una carta de Padrón para que fuera a MDC. Ya se sabía el camino de memoria. Había ido tantas veces y siempre le requerían un papel nuevo para poder entrar a estudiar. Habló con el decano y le contó su historia.

El entusiasmo, el proyecto de vida, el esfuerzo de David, es contagioso y logró despertar en su entrevistador el propósito de ayudarlo. Valoraron además su desempeño como atleta y le dijo que aunque ellos no tenían esa disciplina deportiva en sus instalaciones, le otorgaban una beca para seguir sus estudios.

Además le dieron un trabajo en el departamento de “Student Life” dentro de la Universidad. En septiembre comenzó a estudiar, con la frase que le quedó grabada en su corazón, “te vamos a ayudar para que garantices tu futuro y seas un ejemplo para ayudar a otras personas”

Su sueño americano no quedó ahí. Un profesor cubano americano lo vio practicando y siguió sus rutinas. Decidió integrarlo a su club, a su Dojo. Será su sponsor y volverá a participar individualmente en el US Open de las Vegas, en la categoría de Kata, después de siete años. Allí había ido con la bandera venezolana, como representante de su país. Y volverá con el corazón de su patria en su competencia.

David se pudo comprar su carro y comenzar su vida. Siguió trabajando los fines de semana en el aeropuerto de hidroaviones y entre semana en la Universidad y estudiando. Tanta maravilla le hizo pedirle una entrevista a Ileana Ros-Lethinen para agradecerle sus esfuerzos para que él pudiera llegar hasta donde ahora ha llegado. Ella quedó encantada con la iniciativa de David, con sus sueños, con su esfuerzo y trabajo. La recompensa que David le quiso dar a Ros-Lethinen fue regalarle la bandera con la que ha competido y ella emocionada se quedó más tiempo del previsto escuchando la historia de un venezolano que quiere estudiar, luchar por sus metas y que su país sea libre en un futuro cercano. 

David Bavaresco 18- 34 elite kata male (Kanku sho) Martial Art Festival … https://youtu.be/qXt_ROecgWI  via @YouTube

La gratitud por tu apoyo a los perseguidos políticos vzlnos como @davidbavarescok es inmensa, has trazado su futuro, gracias @RosLehtinen ! https://twitter.com/roslehtinen/status/783721885343318016 

David abraza el sueño americano