Octubre 10, 2016.-Dicho artículo replica -y amplifica- este artículo del sitio web, “el definido” de Chile 7 mitos sobre la migración, adaptándolo un poco a la realidad y al contexto de esta situación en Panamá.

Panamá en los últimos años se ha convertido en un destino muy atractivo para los migrantes, aunque principalmente de latinoamericanos en los últimos años debido a al aumento de intensidad de las crisis en países europeos, también ha recibido una gran cantidad de migrantes europeos, principalmente provenientes de España.

  1. Los extranjeros están invadiendo a Panamá 

Panamá según las ultimas cifras de la Contraloría General de la República cerro para el 2015 con una población estimada de 4 millones de habitantes (Población total al cierre de 2015) de los cuales 180,000 son extranjeros según data del portal Pew Global, Origins and Destinations of the World’s Migrants, from 1990-2015, lo que representa un 4,5% de la población total del país, y aún considerando que puedan existir varios cientos o miles en una condición no registrada por razón de no poseer un estatus migratorio legal, posiblemente esa cifra no supere ni el 7% de la población total nacional.

Incluso, el mismo portal (Pew Global) estima que para el mismo periodo, cerca de 140,000 panameños han emigrado al exterior, siendo el destino principal los Estados Unidos donde se estima deben haber unos 110,000 panameños. Donde podríamos ver un balance bastante equilibrado que señala que de cada panameño que emigra de Panamá, un extranjero emigra a Panamá.

Panamá se encuentra dentro del rango del promedio global cercano al 3,5% que representa la masa total de extranjeros a la población total de un país. Incluso en países desarrollados el numero de extranjeros frente a la población total suele superar el 10%, siendo ejemplos claros: El Reino Unido que con una población estimada de 64 millones de habitantes, cerca del 13% de la misma son extranjeros (8,540,000), Estados Unidos con una población aproximada a los 325 millones de habitantes, cerca del 14% es conformada por extranjeros (46,630,000) o Canada que con una población aproximada de 35 millones de habitantes, cerca del 22% es conformado por extranjeros (7,840,000). Solo por mencionar algunos casos.

2.  Los extranjeros son quienes más cometen delitos.

Según las cifras de la Contraloría General de la República en su estadística de “DETENIDOS EN LA REPÚBLICA, POR ÁREA, SEGÚN NACIONALIDAD Y FALTA O DELITO: AÑO 2015”, de los 66,956 detenidos por faltas administrativas o delitos en Panamá para el 2015 de ellos el 15% eran extranjeros (9,937), de los cuales según la gráfica “por faltas y delitos” cerca del 50% de estas detenciones equivalen a faltas u otros delitos, haciéndose muy complicado por falta de una estadística más especifica, la cual nos muestre la relación real basada en el total de detenciones, que nos permita definir cuantas de estas detenciones se les atribuye a extranjeros por comisión de faltas y cuantas por comisión delitos -y de que tipo-. Pero, esencialmente el dato más relevante es que el 85% de las detenciones totales por faltas o delitos son cometidas por panameños.

3.  Los extranjeros no pagan impuestos o envían todo lo que ganan al exterior

Podrían ir juntos estos mitos. Precisamente porque en Panamá parece ser una gran preocupación la “fuga de divisas”, cuando para el primer semestre de 2016 se enviaron al exterior $404 mdd frente a unos $205 mdd recibos en remesas a Panamá, ver “remesas generan $209 millones en fugas de divisa”, (un 49,5% menos lo que se recibe sobre lo que se envía), siendo una cifra equilibrada a razón que no representa riesgo de descapitalización para el país porque cuando hacemos la comparación sobre el dinero enviado en remesas frente a la Inversión extranjera directa (IDE) en el mismo periodo, lo enviado representa casi el 14% de los $3,018 mdd (IDE primer semestre 2016) recibidos en ese concepto también en el primer semestre, por lo que lo enviado debe ser considerado como envío de divisa a familiares, y no como “fuga de divisas para inversión en el extranjero”, sobre este mismo renglón habría que analizar cuanto % del ingreso percibido por un extranjero que reside -y genera ingresos- en Panamá es enviado al exterior, porque la contraparte del dinero no enviado ingresa a depositos de ahorro, es invertido o consumido en adquisición de productos de bienes y servicios que estan gravados en regla general en 7%,que si analizamos la composición de nuestro sistema fiscal la estrategia ha sido reducir el ingreso por renta, y aumentar el ingreso por consumo. Es decir es un mito completamente que el extranjero no paga impuestos o que total de su ingreso generado es enviado al exterior.

 4.  La mayor regulación o una política migratoria más “fuertes” nos librara de la migración

Es un razonamiento meramente infundado y falso. Existen muchísimas criticas y  oposiciones para que un extranjero pueda regularizar su estatus migratorio fácilmente, por temor que esto producirá que más extranjeros se sientan atraídos con emigrar hacia el país, algunos obvian que las razones para emigrar a Panamá son obvias: Economía creciente, inflación baja o de crecimiento mesurado anual debido a poseer una moneda  estable como el dolar, salario minimo alto y oportunidades para emprender en un mercado en diferentes sectores que a falta de innovación tiene muchos “huecos”. A parte un atractivo poco visto, según indices de medición anual como el Indice de Competitividad  Global del Foro Económico Mundial, fuera de los problemas debido a la regulación o inoperancia de instituciones estatales, el otro factor es “falta -o escasez- de una mano de obra calificada”, por lo que gran parte de la migración´proviene de personas que poseen -o creen poseer- las habilidades y destrezas técnicas para suplir los vacíos del mercado, que ojo, si no fuera por ellos varias Multinacionales tendrían aún mayores dificultades de operación en Panamá.

Lo que producen las politicas migratorias más “fuertes” es precisamente un flujo de entrada similar al que ya tenemos , pero el plazo de estancia seguirá -o aumentara- a la irregularidad, porque es una falacia de falsa causa, aquella relación causal que frente a indicadores positivos de crecimiento y estabilidad, la migración se disminuya por razón de políticas migratorias, (i.e. Caso de Estados Unidos con inmigrantes).

Lo que si termina siendo contraproducente al imponer una regulación más “dura” ya sea como requisito de entrada, obtención de visa de trabajo o la imposición de tasas muy altas para obtenerlas es que existirá una reducción de la entrada por vías legales, los extranjeros trabajaran de manera ilegal y no pagaran aquellas obligaciones tributarias exigidas por ley debido a su falta de registro por causa de su situación, nuevamente el país podría ver una reducción significativa en cifras, pero un aumento en la misma escala de la percepción que las cifras no reflejan el sentir de la ciudadania.

5.  Los extranjeros son la causa del aumento de precios en Panamá 

En Panamá vivimos la “falacia del crecimiento”, ya que por mucho tiempo hemos mantenido un ciclo económico tendiente al crecimiento que indica que la economía es pujante con tasas en promedio superiores al 4% en los últimos 8 años, e incluso superior a los 2 dígitos en determinados periodos, sin embargo pocas veces se ha hecho un análisis profundo que indique las fuentes del crecimiento de la economía, por decirlo así si analizaremos factores de cuanto influyo “la inversión estatal directa e indirecta” para los periodos de mayor crecimiento de la economía, así como si cuantificaramos y relacionaremos el total de los fondos que fueron lesionados al patrimonio del Estado a causa de la corrupción y que luego fueron puestos en circulación en el mercado como consumo o como “inversión nacional directa”, podríamos cuantificar nuestras tasas reales -o naturales- de crecimiento.

En sí, Panamá es un país que no llegara a sufrir de Super-Inflación o Hiper-inflación debido a sus condiciones, incluidas el hecho de carecer de una moneda propia y de un Banco Central Emisor de la misma, de hecho en los últimos años el rango donde más creció la economía fue el mismo cuando más creció la inflación (2011) con un 6%, pero en promedio este indicador aumenta en promedio del 3% en el país según data del Banco Mundial (ver punto 74 “PANAMA: LOCKING IN SUCCESS A SYSTEMATIC COUNTRY DIAGNOSTIC”), sin embargo atribuir que el aumento de la inflación se debe a los extranjeros carece de fundamento alguno.

Sí, bien la llegada de nuevos extranjeros puede aumentar el consumo, para un periodo de desaceleración como el que estamos viviendo actualmente es positivo para la industria, pero posiblemente no para el consumidor. La causa es que a pesar de que la economía sigue creciendo -en cifras- se ha reducido el porcentaje de crecimiento en comparación de otros años, pero justamente el hecho de poseer inmigrantes ayuda a balancear el consumo especialmente sobre el comercio al por menor. Existen otros factores relativos al aumento de la inflación tales como el aumento del salario mínimo en forma tan escalonada en los últimos años, a tal punto de ser el mayor de América Latina, debido a que a cada aumento de salario, aumenta de la misma manera los costos operativos de las empresas, costo que es traspasado directamente al consumidor.

Así mismo como se ha dicho que el aumento de los costos del mercado inmobiliario se debe también a que los precios de residencias y apartamentos se han vueltos impagables para el mercado local, y dichas unidades son ocupadas por extranjeros. También se debe señalar dos factores: Después del “boom inmobiliario” de 2007 donde muchas promotoras correspondieron a los indicadores de mercado y procedieron a construir proyectos de alto valor debería analizarse en promedio cuantas unidades han sido ocupadas y cuantas no; así como debe verse la gran promoción que ha tenido el país para destino de retiro, lo que la llegada de gran cantidad de extranjeros con alto poder adquisitivo ha movido en gran parte dicho mercado, más que el balance o promedio de extranjeros que llegan al país.

Claro, se debe señalar que si bien los extranjeros han ayudado a en parte ser causa del aumento de tasas de inflación, es un mito que esta se ha “disparado” por culpa de ellos. Sí, la relación fuera así entonces se debe atribuir que los extranjeros son la causa del crecimiento económico de Panamá (que en gran parte lo es -ver IDE de últimos años-).

  6.  Los extranjeros son la causa del desempleo en Panamá

Ya que sí bien es cierto, que la tasa actualmente ronda actualmente el 5,6%, “Tasa de desempleo vuelve a aumentar” , la perspectiva de crecimiento de esta tasa viene en aumento desde el 2012 -según cifras- y al igual que como mencione en el punto anterior no se ha hecho una medición objetiva de cuanto representaba la generación de empleo de manera directa e indirectamente debido a la inversión publica en el periodo de mayor crecimiento de la economía.

Sí, bien el extranjero ha llegado en búsqueda de empleo y en algunos casos ha logrado desplazar al panameño en determinados puestos de trabajo, señalar que ellos son la causa que la tasa aumente es irracional, cuando existen diversos factores que influyen tal como: “la poca calificación técnica y académica” para desempeñar determinados puestos de trabajo, sobreexceso de oferta de trabajadores en determinadas profesiones o las discrepancias entre la alta aspiración salarial de un trabajador en comparación de su experiencia y preparación.

Así, como también existen factores relativos a las propias empresas o empleadores con respecto a las ofertas que realicen y que no le generen interés alguno a los desempleados, tales como excesivo numero de funciones con una relación negativa con respecto al salario que están dispuestos a pagar, excesivos requerimientos de experiencia o preparación académica con oferta salariales consideradas como “bajas” o la limitación a las posibilidades de crecimiento -y desarrollo- personal para el empleado.

A pesar de la existencia de desempleados podría determinarse que una gran cantidad de ellos no estaría dispuestos a aceptar un empleo que no cumpla -o se acerque- con las aspiraciones que ellos deseen, al igual que en muchos países, el extranjero en gran medida que llega con menor, igual o mayor preparación académica -e incluso experiencia técnica- que un local esta dispuesto a aceptar cualquier tipo de condición laboral para lograr su “supervivencia”, esto quiere decir que actualmente gran cantidad de ellos esta realizando las laborales que el panameño “no quiere”.

      7.  Los inmigrantes no tienen derechos, ya que no son ciudadanos. No pueden quejarse.

Resulta que la nacionalidad no es la base de los derechos, su fundamento es la condición de ser humano. Toda persona tiene derecho a una vida digna y puede exigir seguridad, respeto y defensa contra los abusos.

Así mismo como que nuestra carta magna en su artículo 17 ha establecido que las relaciones y las condiciones entre Panameños y extranjeros están determinadas por la igualdad jurídica y de condiciones, por lo que ambos gozan de los mismo derechos y obligaciones sin llegar a tener fueros y privilegios (art. 19 Constitución Política), esto en otras palabras quiere decir que al igual que un panameño puede quejarse de las situaciones que ocurran en Panamá, un extranjero también posee el mismo derecho de expresión con sus limitaciones que señala la Constitución, y posee un derecho absoluto (tal como lo ha definido la jurisprudencia nacional) para poder expresar su opinión.

¿La opinión debe ser con respeto? Debe ser considerada de igual condición que la de un panameño, tal vez un extranjero debería “agradecer” las condiciones y privilegios que le ha ofrecido el país, y de no gustarle debería renunciar a dichos beneficios e irse. Pero, en esa misma proporción podría aplicarse que aquel panameño que se beneficia de los privilegios que tiene Panamá y aún así no le gusta “nada” podría también emigrar a otro mejor país. Panamá es de todos los que se encuentren en su territorio, y cumplan con sus leyes.

  8.  “El trato de migrantes es igualitario”

Es una realidad tangible en Panamá -como en casi cualquier otro país latino- que no es el mismo trato -o consideración- que recibe un migrante proveniente de otro país latinoamericano que un migrante proveniente de un país Europeo o de Estados Unidos, siguiendo claros estereotipos de un práctica de racismo que poco a poco producirá roces más violentos.

Claramente existen más mitos de los que he enunciado en este artículo, pero en si deberíamos instar a ver que el fenómeno de migración hacía Panamá ha creado más beneficios que los perjuicios que ha podido generar, ademas permite observar un indicador -no científico- pero que permite darnos cuenta que el deseo que produce moverse a Panamá es debido a una motivación que la situación en el país va mejor que en la del país de origen del migrante.

En algún momento -salvo ciertas excepciones- alguno de nuestros familiares fue “extranjero” en Panamá y aquel que asegura que sus antepasados provienen del territorio seguramente en algún momento de la estructura de su árbol genético ha sufrido variaciones o transformaciones al unirse con material genético extranjero, es por ello que hoy en día los nacidos en Panamá en primera generación, o aquellos que tienen más de 10 generaciones en el territorio, los naturalizados o los extranjeros recién llegados tienen la misma posibilidad de ser panameños y disfrutar de los beneficios que otorgan las condiciones en el país.

Es por ello que el enfoque al cual deberíamos guiar el rumbo del país no debe ser el de apoyar la premisa de “no más extranjeros”, sino aquel de intentar resolver nuestras posibles debilidades frente a las habilidades y destrezas que estos posean, porque el desarrollo individual depende de uno mismo, y no debe estar sujeto a condiciones externas que pocas veces tienen un impacto directo sobre nuestras vidas. Es por ello que si crees en estos o otros mitos sobre los extranjeros solamente estas utilizando una excusa para reducir tu esfuerzo para proseguir tu desarrollo como individuo y que es el mecanismo más optimo para cumplir con tus metas y objetivos.

“Mitos sobre la migración a Panamá que están completamente equivocados”