Septiembre 17, 2015.- A propósito del hallazgo de fosas comunes en la línea limítrofe con Colombia no fueron contactados para la identificación de cadáveres
Familiares de 30 personas que permanecen secuestradas y desaparecidas desde 2002, acusaron desatención de los gobierno nacional y regional al tiempo que indicaron que se sienten desesperanzados por no tener soluciones a sus casos ni contar con un ministerio Público que los apoye ni un Estado que los proteja.
Indicaron que no es por falta de pruebas que estos casos no hayan sido resueltos sino por negligencia.
“Todos estos casos debieron ser resueltos de 5 a 15 días y en el peor de los resultados, nosotros deberíamos tener ya en nuestro corazón, por lo menos haber culminado un luto. Esa es la realidad por muy dura que sea”, dijo Porfirio Dávila, hijo de un secuestrado hace 12 años. Cuestionó que el gobernador del Táchira, José Vielma Mora señalara que en el estado hay cero secuestros.
A propósito del hallazgo de fosas en municipios de frontera donde han sido enterradas personas, Dávila indicó que los organismos gubernamentales nunca contactó a los familiares de secuestrados y desaparecidos de ese grupo para identificar alguno de los cadáveres.
“El Estado venezolano nunca ha pedido una prueba de ADN de nosotros y el Estado venezolano sepulta en esta tierra decenas de cadáveres como N/N en fosas comunes en el cementerio de San Cristóbal y dónde están las pruebas de ADN de esas personas… Nosotros nos reunimos una vez con un fiscal superior de aquí que nos dijo que para él era igual resolver un problema de un carrito de helados robado que el de nuestro familiar secuestrado”, agregó.
Respecto de los autores de los secuestros y desapariciones, recordó la incursión de funcionarios policiales, militares, las Farc, el Eln y el extinto Epl.
