25F Aseguran que PNB pidió perdón al liceísta luego de dispararle en la cabeza

San Cristóbal.- Glenda Lugo, vecina de la calle 12 del barrio San Carlos, donde perdió la vida el estudiante Kluiverth Ferney Roa Núñez de 14 años de edad, narró el hecho del momento en que el joven fue asesinado por un efectivo de la PNB mientras se desarrollaban protestas en la Universidad Católica del Táchira (UCAT).

Acompañada de otros residentes de la zona, la mujer aseguró que el joven no participaba en la manifestación y pasó por el lugar porque había salido de su liceo, ubicado muy cerca de la universidad.

“Esto ya pasó de claro a oscuro, cómo es posible que un niño de 14 años venga corriendo y este policía se haya bajado de la moto a apuntar al niño que le decía ‘por favor no me mate’  (…)  después de que le disparó tiene el cinismo de arrodillarse y pedirle perdón”, explicó.

Reiteró que Kluiverth corrió porque los efectivos policiales estaban “atacando” a todos los vecinos que estaban en la calle. “Él lo único que hizo fue salir corriendo porque la policía nos estaba atacando a todos. Es mentira que el niño iba a robar la moto, lo que hizo fue salir corriendo”.

La mujer contó que en ese momento cuando fue abordado por el efectivo policial, el liceísta tenía la cara tapada con sus brazos como para protegerse y que cuando el PNB respondió con su arma de fuego, todo transcurrió muy rápido. Posteriormente, el policía se arrodilló y le dijo al joven mortalmente herido “perdóname”.

Lugo dijo que el PNB  quería trasladar al estudiante herido. “Tengo los brazos   morados de los golpes porque ellos se lo querían llevar arrastrado en la moto y yo misma le dije que de aquí no se lo llevan, después de que lo mataron qué van a hacer, tirarlo como a un perro, pues no se lo lleva”.

La testigo explicó que luego de eso los PNB les lanzaron bombas lacrimógenas y también dispararon resultando afectada su hija menor de edad quien presentó heridas en la espalda por esquirlas de perdigones.

Advirtió al primer mandatario regional que cesara el ataque contra estudiantes y recordó que al menos seis liceos y colegios se encuentran cercanos a la UCAT.

Manifestó que los vecinos apoyan a los “muchachos cuando salen a protestar” y aseguró que esa es la molestia que tienen los policías contra vecinos y estudiantes.

En el lugar donde murió Kluiverth se realizó una vigilia; los restos mortales fueron llevados hasta ese lugar para luego darle cristiana sepultura.