Venezuela Awareness
El "Gato"Briceño

15 Enero 2014

Venezuela Awareness
El “Gato”Briceño

El ex gobernador del estado Monagas, José Gregorio “El Gato” Briceño, salió del país tras enterarse que había perdido las elecciones de gobernadores en diciembre de 2012, se marchó a Costa Rica, la cuna de los exiliados políticos venezolanos. Asegura haber vivido “una persecución atroz con todos los cuerpos de seguridad”. 

Quien conoce a El Gato Briceño sabe que en los tiempos en que era gobernador del estado Monagas no era muy fácil entrevistarlo, siempre tenía una agenda apretada, y acercarse a él era una tarea titánica por toda la gente que lo rodeaba entre escoltas y funcionarios regionales. Sin embargo, muchos también lo recuerdan por ser un político dado a su pueblo al que ayudó sin pedir nada a cambio.

Hoy, ha pasado casi un año desde que está medianamente alejado del mundo político venezolano, no por gusto, sino por obligación; José Gregorio Briceño vive como exiliado político en Costa Rica, país que lo acogió luego de perder las elecciones regionales de gobernadores el 16 de Diciembre de 2012.

Para nadie es un secreto que Briceño siempre fue visto de reojo dentro del chavismo, incluso él lo sabía y siguió trabajando a pesar de no sentirse tan cómodo con el proceso revolucionario, es más, según cuenta en una entrevista privada realizada desde San José, Costa Rica, fue dos años después de haber llegado a la gobernación de Monagas cuando empezó a darse cuenta que la “sublevación bolivariana” no era tan bonita como parecía.

-¿Cuándo abrió los ojos y se dio cuenta que el fallecido presidente Hugo Chávez iba por un camino con el que usted no congeniaba política y económicamente?

Si mal recuerdo fue en el año 2006 aproximadamente, tenía dos años en la Gobernación de Monagas, fue ese año cuando comenzaron las expropiaciones y las confiscaciones en todo el país.

-¿Luego de las expropiaciones consideró usted entonces que estar dentro del chavismo era cargar una cruz muy pesada?

No, traté de hacer y decir algo en cada reunión de Gobernadores que convocaban. Recuerdo que en una reunión entre los años 2008 y 2009 se planteó que se debía acabar con el estado federal y descentralizado, y yo me opuse junto a Henry Falcón, quien era mi aliado; él y yo siempre nos opusimos a acabar con el estado federal y descentralizado, y desde allí a todo el que intentara levantarse le hacían la cruz.

Ya en el 2006 traté de decir algo, que no era el camino correcto, allí me hicieron la cruz y decían que no era un hombre de fiar, porque la vía era el comunismo y el socialismo.

-¿Qué pasaba en esas reuniones cuando usted y Henry Falcón se oponían o presentaban una objeción, y por qué tardó tanto en tomar la decisión de renunciar al chavismo si desde hacía tiempo muchos políticos aseguraban que su camino dentro del oficialismo estaba marcado?

Uno trata de hacer las cosas lo mejor posible, primero pensé en el estado Monagas y en la gestión de gobierno, en la infraestructura social que venía haciendo, yo traté de evitar todo tipo de enfrentamiento hasta que se dio, a mí me buscaron y me provocaron desde un principio y yo no  les mordía el peine. Cuando nos imponían o nos enviaban por el teléfono presidencial que debíamos vestirnos de rojo a un evento, yo llegaba vestido de otro color, era mi manera de darle una señal y decirles que yo actuaba de acuerdo a mi conciencia.

-¿Cuál fue el último evento o reunión al que asistió?

El último evento al que asistí fue en el Salón Ayacucho en el año 2011 si mal recuerdo, fue una despedida que iban a hacerle al presidente Hugo Chávez quien partía a hacerse una operación, y me llegó un mensaje del entonces vicepresidente Elías Jaua que debía ir rojo rojito.

Yo llegué tarde por el tráfico, y fue algo muy desagradable porque cuando entré todo el mundo volteó a mirarme y me vieron con malos ojos porque estaba vestido de azul. El enfrentamiento con Diosdado Cabello tenía sus efectos, él estaba más cerca que yo del entorno presidencial y me mal ponía a cada rato.

-¿Cuándo comenzó esa rivalidad con Diosdado Cabello?

No siempre existió, en el año 2007 él me mandó a grabar con el jefe del DIM, El Pollo Carvajal, y esa grabación supuestamente se la dieron al presidente Chávez, quien me llamó después del pronunciamiento del General Baduel, y tuvimos unas fuertes palabras, él me dijo y yo le dije, él me irrespetó y yo lo irrespeté.

En lo último de la conversación me dijo que me ratificaba su amistad, y seguimos trabajando, esto fue en noviembre de 2007.

-¿Hubo realmente alguna relación con el general Raúl Isaías Baduel?

A la historia le consta y al mismo Baduel que yo nunca tuve alguna relación con él ni  con ningún militar, yo no soy militar, me quisieron vincular y le llevaron una grabación a Chávez diciendo que yo estaba conspirando contra el gobierno.

La DIM y los cuerpos de seguridad me grababan descarada y deliberadamente porque uno de los sueños de Diosdado Cabello era poner a su hermano José David Cabello como gobernador del estado Monagas, no lo pudieron lograr porque en el 2008 hubo elecciones internas en el partido, las cuales gané.

-Pero tranquilamente estas elecciones internas se pudieron haber manipulado, pudieron haber tomado otra decisión y no lo hicieron. ¿Qué pasó allí?

La ventaja con la que gané fue holgada, ellos inclusive estimularon y apoyaron en aquel entonces al que era Alcalde de Maturín (Numa Rojas), y yo le saqué 50 mil votos de ventaja. Después hubo otras elecciones internas para las elecciones parlamentarias del 2010 y nosotros ganamos en todas las circunscripciones.

Entre esos ganadores estaban María Mercedes Aranguren, Jesús “Kike” Domínguez, Nelson Rodríguez, y Orangel López quien me traicionó al mes.

Muchos aseguraban que Briceño era más opositor que chavista, pero en el año 2011, meses antes del catastrófico derrame petrolero en aguas del río Guarapiche (02-2012), dentro del partido de gobierno había un secreto a voces, éste era que el gobernador de Monagas era el único hombre dentro de las filas rojas rojitas que podía garantizar un nuevo triunfo en la entidad sin mayor esfuerzo y sin mucha estrategia. Para el triunfo El Gato tenía de su lado el sentimiento popular y una gestión que sobresalía en el Oriente venezolano.

Su estancia en el chavismo era momentánea, estar dentro del PSUV era vivir con una cruz muy pesada encima, sin embargo, la misma vida le dio una excelente oportunidad para salir, aunque no muy agradable por toda la presión política y social vivida por la tragedia del Guarapiche.

-¿Fue el derrame petrolero en aguas del río Guarapiche la oportunidad perfecta para salirse del chavismo o a pesar de esto hubiese anunciado una renuncia al partido? 

Fue una circunstancia forzosa, no fue una oportunidad, el Presidente de la República quería obligarme a mandar agua y me negué; ya especialistas me habían alertado que si lanzaba el agua contaminada me convertiría en un genocida y no habría ningún país en el mundo que me pudiera acoger, además tenía que pensar en Monagas y en mi familia.

De haber enviado agua al pueblo, las muertes por el consumo pudieron haber llegado a las cien mil. El petróleo tiene 46 componentes tóxicos y 16 de estos son venenosos, si se salvaba alguien a los años iba a padecer cáncer, esto no lo digo yo, todo está sustentado en un informe de la Organización Mundial de la Salud.

-Después de tanta pelea el tiempo le dio la razón con el derrame petrolero y la contaminación del agua, el presidente Nicolás Maduro antes de ser electo decretó una emergencia en Maturín, ¿Qué le puede decir a aquellos que no confiaron en usted en ese momento?

El tiempo me dio la razón, ellos decretaron una emergencia nuevamente, y fueron tan cínicos que inauguraron una planta que yo fundé hace cinco años atrás con una inversión  de 110 mil millones de bolívares y el Gobierno Nacional no aportó ni un centavo, ni siquiera para los químicos que se necesitaban para potabilizar el agua.

Recuerdo que recibí una planta que bombeaba 150 litros por segundo y la llevé a más de 2 mil litros por segundo, siendo una de las más modernas del país. Nosotros resolvimos la mala situación del agua en Maturín, un inconveniente que tenía 32 años, era un problema crónico y ellos en ocho meses acabaron con el sistema por falta de gerencia.

-¿Qué opinión le merece la situación de la vialidad de Monagas?

Esa fue una de las obras de envergadura de El Gato Briceño, ningún otro gobernador en Venezuela ha construido con recursos propios 72 kilómetros de autopistas como lo hice yo en Monagas. Tuvimos las mejores autopistas y ahora es todo lo contrario.

-Luego de su expulsión del partido de gobierno vinieron atropellos y amenazas que en su momento fueron denunciados por usted. ¿Qué tan difícil fue el camino y la campaña para las elecciones regionales del 2012?

Fue muy difícil y estresante, viví una persecución atroz con todos los cuerpos de seguridad. Asaltaron la Policía del Estado, lo que fue un vulgar golpe de estado, allí no funcionó ni se respetó la institucionalidad, se vio como todas las instituciones están arrodilladas al régimen y eso me sirvió de reflexión. Sin embargo, resistí durante nueve meses, no me pudieron demostrar ningún acto de corrupción, en la Contraloría General de la República reposa una constancia que no hubo daño al patrimonio de la nación.

Después de un año desterrado de mi patria y perseguido, me acusan y me dictan una orden de aprehensión porque fundé una empresa con la que están persiguiendo a una digna diputada como María Mercedes Aranguren, esto es algo que ofende a la Academia de Ciencias Jurídicas de Venezuela, ofende también a la inteligencia de todos los abogados de la patria, por la barbaridad que está cometiendo la Fiscal General de la República Luisa Ortega Díaz y los 32 magistrados del Tribunal Supremo de Justicia.

Será la Corte Internacional de La Haya, la justicia internacional o la justicia divina, que se encargará de ellos como ellos se encargaron de Franklin Brito, la juez María Afiuni e Iván Simonovis, entre otros.

Luego de haber salido del Partido de Gobierno, noticia que le dio la vuelta a toda Latinoamérica, Briceño recibió en un principio mucho apoyo de Alcaldes y funcionarios de su gobierno, pero poco a poco empezó a ver como mucha de su gente de confianza le fue dando la espalda, traiciones que a su juicio no se olvidan y duelen en el alma.

Después de perder las elecciones regionales de 2012, las cuales a su juicio no ganó por la abstención que se registró en dichos comicios electorales, 46,16% para ser exactos y séptima más alta desde 1989, salió de Monagas y Venezuela casi de forma inmediata, ya que su seguridad estaba comprometida y su vida estaba en peligro. Para entonces muchos aseguraban que se había escondido en su natal pueblo Caicara en el municipio Cedeño, otros que había sido detenido.

Asegura extrañar como a nada en el mundo a Venezuela, al estado Monagas y a su familia, como dice “un indio enzapatao necesita estar en su tierra”, así se define mientras se le dibuja en su rostro la ausencia y un sinfín de recuerdos de su vida.

-¿Cómo tomó usted tantas traiciones después de su salida del Partido Socialista Unido de Venezuela?

Las traiciones son algo doloroso si vienen de personas que uno creía que tenían valores, yo creí en mucha gente y fui  traicionado, perseguido, acosado, vilipendiado, y sin poder defenderme.

Le doy gracias a los medios nacionales de mi país que me han venido dando una cobertura, pero en mi estado no puedo salir en ningún periódico o emisora porque en seguida son perseguidos por el Gobierno.

-¿Cómo se siente estar en el exilio y tan lejos de su tierra?

Es muy duro, estar en el exilio es como estar preso, lejos de mi familia, de mis hijos, mis hermanos, es muy difícil pero eso no me baja la dignidad ni el ánimo de seguir luchando por Venezuela. Siempre estoy declarando a los medios y a pesar de estar exiliado, vivo defendiendo la institucionalidad y lo poco que queda de democracia en mi país.

-¿Qué pasó aquel 16 de diciembre de 2012 cuando se celebraron las elecciones y en qué momento se enteró que los números del CNE no le favorecieron?

Tuve una persecución ese día y yo estaba informado que habían planificado detenerme sin ninguna justificación. Tenía todas las informaciones que me pasaron desde el PSUV y ese mismo día preparé la salida, sufragué y me trasladé a un estado vecino.

Luego busqué las maneras de salir del país, me fui y llegué a Costa Rica el 21 de diciembre, país al que entré vía aérea por Paso Canoa y Ciudad David (frontera con Panamá).

¿Por qué Costa Rica y no otro país?

Revisando la historia de mi patria y los exiliados desde la época de Rómulo Betancourt y la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, vi que Costa Rica siempre acogió a políticos venezolanos. Costa Rica es un país muy parecido a Venezuela y con gente muy amable.

Estoy y siempre estaré muy agradecido con este pueblo por la estancia, aquí sí hay democracia y se respetan los derechos de cada quien.

Briceño está casi convencido que la economía será quien derrote al proceso revolucionario y socialismo del siglo XXI.

Confesó tener ganas de volver a Monagas pero lo hará una vez que se garantice que su llegada sea segura, además ese día será cuando haya otro panorama político en Venezuela y esté garantizada la libertad en el país.

Quien lo conoce sabe que al volver, buscará nuevamente gobernar Monagas, no por capricho, sino porque el monaguense de a pie lo pide en la calle al ver la desidia y lo abandonado que está la región a tan solo un año de haberse ido.

Entrevista realizada por Jesus Alberto Puerta en Costa Rica

Foto: Archivo

http://www.noticiasdeaqui.net/actualidad/periodismo/25406-el-gato-briceno-estar-en-el-exilio-es-como-estar-preso.html